Una de las principales consecuencias que tienen los Tratamientos de Reproducción Asistida (TRA) es la aparición de diferencias dentro de la pareja.

Como ya conocéis por propia experiencia, los TRA interfieren en muchos ámbitos de vuestra vida. En vuestra relación de pareja, en vuestras amistades, en la relación con vuestras familias, en vuestros trabajos, ocio…

El desgaste que sufre la pareja es importante, por ello cuanto más fuerte sea vuestro vínculo, mejor parados saldréis de esta situación.

Algunas parejas no logran superar estas diferencias y terminan por separarse. Si el motivo de la separación son únicamente las desavenencias que han aparecido provocadas por la esterilidad y las consecuencias de sus tratamientos, no permitáis que lo que tenéis se destruya por estas razones.

Lo que habéis formado es muy bonito, os queréis, que es muy importante. Recordad que antes de comenzar este viaje teníais un proyecto común. Tenéis que buscar la manera de salvar estos obstáculos conjuntamente. En caso de que no podáis hacerlo solos, podéis buscar un terapeuta de pareja que os ayude a reconducir vuestras ideas y llegar a un consenso.

No dejéis que se rompa vuestra unión por una situación temporal. Limad las asperezas que este momento os ha provocado. Esta etapa pasará, tarde o temprano, pero pasará. Si la pareja tiene unas bases sólidas, permanecerá unida a pesar de las dificultades.

Evitad las tensiones, los malos humos, los rencores, corréis el riesgo de que con el tiempo aparezca la rabia.

Mima a tu pareja, comparte esta experiencia con ella con sinceridad, exprésale tus emociones, tus sensaciones e interésate también por las suyas, éstas son igual de importantes.

Generalmente nos centramos más en cuidar a las mujeres en este tipo de procesos, porque son ellas las que soportan el mayor peso de los tratamientos médicos, pero no nos podemos olvidar tener en cuenta también a sus parejas.
Tu pareja habitualmente permanece en un segundo plano, pero también siente los fracasos de la misma manera que los sientes tú, aunque muchas veces no lo demuestre. Está bien que tu pareja se mantenga fuerte, para que pueda tirar del carro cuando tus fuerzas flaqueen. No le eches en cara que no se preocupa, que no padece lo mismo que tú, seguramente sí lo haga, pero está intentando permanecer firme para que tú no te vengas abajo.

Si te digo ahora que disfrutes junto a tu pareja de estos momentos de búsqueda, vas a pensar que se me ha ido la cabeza. Pero me gustaría que esta travesía tan apasionante la recorrierais compartiendo entre vosotros la alegría e ilusión.

Goza con cada paseo, con cada conversación, con cada cena, con cada viaje… todos los momentos de la búsqueda junto a tu pareja son igual de valiosos. Si lográis superar esta etapa juntos, saldréis reforzados de esta experiencia.

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Gracias por compartir.

Olivia de Prado